Tengo fiebre.
Me duele la cabeza.
No tengo ganas de leer, no tengo ganas de escribir, ni de beber, comer o follar.
La salud, efectivamente, es lo primero, lo más importante. Dime tú para qué me sirve la vida en este momento.
Soy un ser infecto, completamente inútil, que de vez en cuando se levanta de la cama con un quejido sordo para alimentarse con el único fin de la supervivencia.
Espero curarme de forma natural. No quiero ir al médico. Odio a los médicos. Por regla general no confío en ningún ser humano, pero confío mucho menos en su profesionalidad. En este mundo de hoy no existe la vocación, todos son negligencias, operaciones fallidas, accidentes aéreos en Barajas. Los médicos son asalariados a los que no les importa una mierda que te mueras.
No puedo soportar todas esas pruebas, las radiografías, las ecografías, los análisis de sangre, todas esas manos enguantadas en látex actuando frenéticamente sobre tu cuerpo mientras tú ignoras la razón de todos sus movimientos y las enfermeras comparten sus impresiones sobre la cena de Navidad. Anatomía de Grey tiene una parte veraz: en los hospitales son todos gilipollas.
Vuelvo a la cama.
No creo que pueda volver a levantarme. Nunca.
Cita en Malasaña.
Hace 9 años
2 comentarios:
Animo Diana. Tienes que sobrevivir. Ponte buena pronto.
Toma Diana: http://www.myspace.com/bobowendoublesecretbeautycream
Medicina de la buena
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